The Nightwatchman - One Man Revolution (2007)

Después de años de cargar con la reputación de ser uno de los nuevos héroes de la guitarra eléctrica, por sus reconocidos efectos que ya son marca registrada, y de paso, ser conocido por sus constantes batallas sociales tanto de palabra en Rage Against the Machine, como de acción, en Axis of Justice (la organización que encabeza junto a Serj Tankian de System of a Down), Tom Morello decidió unir sus dos pasiones, la música y la lucha por alguna causa “imposible”, guardando las cuerdas metálicas y sacando a relucir dotes, hasta hace poco desconocidas, como cantante de protesta de mano de una guitarra acústica.

Así es, porque el autodenominado The Nightwatchman –un seudónimo escogido precisamente para que no se confundiera su trabajo en RATM con su obra actual, y que increíblemente ha surtido efecto en Estados Unidos, ya que Morello pasa inadvertido bajo ese cariz- pretende darse la tarea de ser el Robin Hood afroamericano del siglo XXI, entonando unas cuantas verdades. Y para eso, invocó al cancionero de Bob Dylan, Johnny Cash, Leonard Cohen y Bruce Springsteen, quienes, como conjunto, poseen las cualidades que Morello requería para desenvolverse en este nuevo papel: una poderosa entrega lírica y una mayor capacidad interpretativa que virtuosismo vocal. Producido por el discípulo de Rick Rubin, Brendan O'Brian, que también había registrado el último álbum de Audioslave, este registro fue grabado en un par de semanas en la ciudad de Atlanta, para el cual contaba con algunos temas compuestos en la época en que tocaba con Cornell, como también otros más nuevos.

Es por eso que antes de escuchar el disco, no hay que crearse la más mínima ilusión de que Morello vendrá a hacer de las suyas con esos efectos que simulan una pila de sonidos más, obviamente, si con la guitarra acústica se tiene que afectar a las melodías o también a un acompañamiento de mensajes, que es la meta principal de este músico. En vez de dedicarse a explorar lugares remotos a los que no había accedido en su experiencia con Audioslave y RATM, su principal interés es transmitir ideas en forma directa, ni siquiera haciendo metáforas simples, y, claramente, hacerse entender y ser escuchado.

A simple vista, para Morello sólo existe el lado oscuro y la luz. Un lado oscuro que habita desde California ('California's Dark') hasta Nueva York ('One Man Revolution') y Latinoamérica ('Union Song'), donde ni siquiera los sueños permiten que el ambiente se esclarezca un poco, y donde los mensajes apocalípticos de la biblia también se interponen en esta búsqueda de claridad.

No es fácil destacar algún tema por sobre otro, porque musicalmente es un disco muy sencillo y puede ser hasta plano, donde las mayores variaciones se experimentan con los instrumentos que Morello va agregando, como la armónica, algo de batería y teclados, quizás las más llamativas, por su cambio de ritmo e intensidad, serían ‘Flesh Shapes the Day’ (con un grito en español “¡sí se puede!”) por la liberadora sensación de diversión que llega a transmitir Morello, y por una onda más rockandrollera, igual que ‘Union Day’, en la cual el músico se despliega mucho más relajadamente, al contrario de gran parte de los temas del disco, donde se nota constreñido y un tanto forzado.

Review de rockaxis.com

Tracks:

1. California's Dark
2. One Man Revolution
3. Let Freedom Ring
4. The Road I Must Travel
5. The Garden of Gethsemane
6. House Gone Up In Flames
7. Flesh Shapes The Day
8. Battle Hymns
9. Maximum Firepower
10. Union Song
11. No One Left
12. The Dark Clouds Above
13. Until The End

14."Alone Without You" (iTunes bonus track)
15."Branding Iron" (iTunes bonus track)

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Link resubido Junio 2013

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